viernes, 3 de diciembre de 2010

Graso error empañó elección de Srta. Folklor en Tonchigüe.



El acto de la verbena artística y elección de la Señorita Folklor que se efectuó la noche del pasado jueves en la parroquia Tonchigüe, en el marco de las festividades de esa localidad, se vio empañado por un graso error cometido al hacer público el nombre de la candidata ganadora.

            En un principio, el acto se desarrollaba con normalidad, ante la presencia de más 2 mil tonchigüenses que se dieron cita al Parque Isidro Olivo Vera para disfrutar de la programación. 

            Hubo varias presentaciones de artistas locales y una destacada actuación de un grupo de marimba y un grupo de teatro, ambos de de la Fundación de Desarrollo Social Cultural, Educativa y Económica (FUNDAE), quienes deleitaron al nutrido público con sus presentaciones.

            Las cinco candidatas aspirantes al reinado de Tonchigüe, también hicieron sus respectivas presentaciones, esta vez con sus trajes folklóricos, para disputarse el título de Srta. Folklor.

            No obstante el acto se empañó cuando se anunció que la ganadora era la candidata número 2, representante del Barrio Nuevo Amanecer, Ana Quiñónez León y, luego de haberle ceñido la banda, uno de los miembros del Jurado calificador señaló que no era esa candidata la que habían designado, sino a la aspirante número 5, esto es a la Señorita Licenia Panta Rodríguez, representante del balneario de Same.

            El suceso generó polémica y causó desazón en los asistentes al acto, demostrando su malestar al abandonar, de manera masiva, el recinto donde se habían congregado, pues en cuestión de minutos las aproximadamente 2 mil personas desaparecieron del sector.

            Posteriormente los organizadores del evento constataron el error pues, en efecto, los miembros del jurado calificador habían dado el mayor puntaje a la candidata número 5, pero en la misiva enviada al maestro de ceremonia, por error involuntario, se entregó el nombre cambiado y por ello el graso error que culminó con el acto que prometía, hasta ese momento, ser uno de los mejores de los últimos tiempos.

            En todo caso, las autoridades parroquiales, luego de los análisis respectivos, concluyeron que no hubo una mala intención, sino un error, lamentable eso sí, pero que jamás se pretendió favorecer o perjudicar a una u otra candidata.

            Lo cierto es que la Srta. Folklor, legalmente electa por el jurado calificador, fue la bellísima y encantadora representante del balneario de Same, Licenia Panta Rodríguez.


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