El Presidente de la federación Única Nacional de Afiliados
al seguro Social campesino (FEUNASCC) Esmeraldas, Víctor Ríos, en un breve
diálogo con esta mesa de redacción, nos hizo conocer que la marcha realizada
por dirigentes de los afiliados al Seguro Social campesino del país, efectuada
el pasado jueves en la ciudad de Quito, cumplió con el recorrido que se habían
programado para el efecto.
“Tuvimos la
oportunidad de ser recibidos en el
Concejo Directivo del IESS, puesto que ese era nuestro principal objetivo. Allí
fuimos recibido por el delegado del Seguro Social Campesino al indicado Consejo
Directivo, funcionario que nos recibió el pliego de peticiones que habíamos planteado
para el efecto”, afirmó el dirigente campesino.
Agrega que
luego se trasladaron hasta la Asamblea Nacional, donde fueron recibidos por la
Mesa de lo laboral “y allí se comprometieron a ayudarnos en que se plasme
nuestro pliego de peticiones”, indicó, añadiendo que buscan una mejor atención
para los afiliados a la Seguridad Social Campesina, enmarcados en que se
designe un médico para cada dispensario que tenga más de 500 jefes de familias
afiliados.
“Asimismo
que se hagan efectiva las partidas para contratar personal cuando los médicos y
enfermeras toman sus vacaciones, pues muchos dispensarios quedan cerrados cuando
los galenos toman sus vacancias y, como campesinos, no tenemos donde atendernos”,
refiere.
Añade que
también se pide que se instale un laboratorio básico y una sala de hidratación
en cada dispensario, para que los afiliados tengan una mejor prestación social,
en cuanto al cuidado de su salud.
En otro
aspecto, también están pidiendo una revisión a la Resolución 327 del Consejo
Directivo del IEES, destacando que en esa resolución sólo se permite la
afiliación a los campesinos que desempeñen la actividad primaria de la
economía, por lo que un humilde zapatero, albañil, sastre, tendero, carpintero,
que viva en el campo, ahora no tiene el derecho de afiliarse y queda marginado
de la seguridad social campesina.
Refiere
que, según esa resolución, mayores derechos tienen los pescadores que los
campesinos, puesto que quien se dedica a las faenas de pesca puede vivir donde
sea, en el campo o en la ciudad, y tiene derecho a ser afiliado en esta
prestación social.
“En todo
caso, lo que buscamos, es que haya mayor equidad y se beneficie a todas las
personas que viven en el campo, las que, en su mayoría, son de escasos recursos
económicos”, concluye señalando el dirigente campesino.
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