Pescador herido luego de choque con otra lancha.

El humilde pescador de la parroquia Tonchigüe, Alfredo Reyes Colobón, de 40 años de edad, se encuentra gravemente herido con quemaduras de primer grado en su abdomen, luego de que fue impactado por una embarcación, mientras se encontraba en la suya, en la madrugada del pasado sábado y se vio obligado a sostenerse de la poma de gasolina por un lapso de aproximadamente 4 horas.

            Según se pudo conocer, por versiones de compañeros pescadores de la zona, el hecho se habría suscitado como a las 03:00 de la madrugada del sábado anterior, en circunstancias en que el infortunado pescador se encontraba en tareas de pesca frente a las costas de Tonchigüe, acompañado de su hijo Erick Reyes Benítez y, para evitar ser divisado por los piratas de mar, apagaron la lámpara mientras descansaban un momento, no obstante, en determinado momento, otra lancha aparece rauda por el sector y les impacta de costado provocando la rotura de los dos costados de la embarcación de los humildes pescadores, mientras la lancha agresora siguió de largo sin poder ser identificada.

            Luego del accidente, los dos pescadores se ven obligados a lanzarse al mar, considerando que la lancha empezó a naufragar y, ya en el mar, toman la poma de gasolina para usarla como salvavidas. El joven padre se embarca apoyando su abdomen en el improvisado salvavidas, mientras su hijo navegaba sujetado a él y la poma.

            Como a las 07:00 del sábado, luego de 4 horas de haber permanecidos a la deriva sobre la superficie del inmenso mar, otro pescador les divisa y le socorren constatándose que, producto de la gasolina y el agua salada, Alfredo Reyes presentaba una gran llaga en su Abdomen, razón por la que de inmediato le trasladaron a tierra para que sea atendido de urgencia.

            Una vez en tierra, el pescador herido fue llevado hasta una clínica asistencial de la ciudad de Atacames, donde se constató que, efectivamente, en su abdomen, tenía una quemada de primer grado, por lo que debió ser internado de urgencia y hasta el lunes en la tarde continuaba bajo extrema vigilancia médica.

            Mientras tanto, en Tonchigüe, un grupo de compañeros pescadores y miembros de la Marina, se adentraron a la mar en búsqueda de la embarcación destruida y, en efecto, horas más tarde la detectaron y procedieron a retirarle el motor, remolcándola hasta la orilla.