Se presentan enfermedades dérmicas y febriles por falta de agua.

Un número considerable de casos de enfermedades dérmicas y febriles que se han presentado en el  Centro de Salud de la Parroquia Tonchigüe, podrían ser originados por la falta de agua potable en esa población, así lo indicó uno de los miembros de esa casa de salud, Luis Pozo Pineda, en una improvisada Asamblea Parroquial efectuada el pasado martes en esa localidad.

            Señaló que, desde su apreciación, no se puede certificar que haya epidemias o endemias de otras enfermedades por causas de la falta del agua potable, a excepción de las enfermedades dérmicas, que son enfermedades de la piel, como infecciones cutáneas que sí se han presentado. “De eso podemos emitir un informe de cuántos niños hemos recibido con estos casos, diaria o semanalmente”, explicó.

            Añadió que podría decirse que las enfermedades dérmicas se generan por  la falta de agua potable debido a que la ciudadanía está utilizando para su aseo personal agua de pozo o de ríos, con ciertos grados de contaminación.

            Asimismo, los cuadros febriles, podrían ser aumento de temperaturas de las personas, porque están racionando el consumo de agua personal debido a la carencia del líquido vital en esta población. 

            Esta aclaración la hizo el galeno, considerando que en la Asamblea se pedía que las autoridades parroquiales declararan en emergencia sanitaria a la parroquia Tonchigüe por la falta del agua potable.

            En todo caso, se pidió que las autoridades locales activen el Comité de Operaciones Emergente (COE) Parroquial, para que se solicite informes relacionados a la falta de agua potable a las diferentes instituciones del sector como la Tenencia Política, Centros Infantiles del Buen Vivir, establecimientos educativos y del Centro de Salud, para que, en base a esos informes, el COE analice la posibilidad de declarar en emergencia a la población por la deficiencia del agua potable.

            Se indicó que el objetivo de declarar en emergencia a la parroquia, conllevaría a que las autoridades competentes se vean obligados a atenderles emergentemente en la solución a este inconveniente que los moradores de Same y Tonchigüe, vienen pasando permanentemente desde hace varios años  una solución a mediano plazo, es la consecución de una planta de tratamiento para tratar las aguas provenientes de los pozos profundos que existen en la comunidad de Same.