En la Asamblea de Afiliados al seguro Social campesino de
Estero Ancho, realizada el pasado sábado 30 de octubre, el Coordinador del
Comité Ejecutivo de esa Organización, Amado Bone Quintero, padre del joven que
falleciera, hace exactamente un mes, por una hemorragia aguda debido a ruptura
de arteria del hígado, en un mensaje otorgado a sus compañeros afiliados,
reveló que su hijo habría fallecido por una presunta negligencia médica en el
Hospital del IESS de la ciudad de Esmeraldas.
Indicó que
mientras su hijo estaba asilado en la clínica del IESS de Esmeraldas pasó por
mil penurias, puesto que no había reactivos para realizar un examen que pudo
haber detectado a tiempo el origen del quebranto de la salud de su joven hijo;
además pasó todo un día esperando un médico cirujano que nunca llegó, pues la
atención únicamente la daban médicos residentes sin experiencias; tampoco había
equipo de tomografía con lo que se hubiese podido detectar la hemorragia
interna del chico y tal vez se hubiese podido controlar a tiempo.
Señala que
la atención a su hijo siempre se la hizo con la presunción de que hubiese
ingerido algún tipo de droga y por ello le ponían sedantes a más y mejor,
agregando que nunca le dieron un diagnóstico clínico acertado, pues a Quito lo
ingresó sin que se supiera que era lo que en realidad le estaba quitando la vida a su hijo.
Finalmente
señaló que los mismos médicos de la ciudad capital le dijeron que es cultura,
del Hospital de Esmeraldas, enviar a los pacientes a Quito cuando los casos son
prácticamente perdidos, por lo que ellos se mostraron interesados en que se
deben tomar correctivos para evitar que los afiliados sigan muriendo por la
deficiencia del Hospital del IESS de Esmeraldas.
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