Luego de aproximadamente 4 días consecutivos de haber llegado agua potable a través de las redes, la misma que fue distribuida de manera sectorizada por cierto tiempo a los diferentes barrios de Same y Tonchigüe, la alegría parece disiparse en los hogares tonchigüenses, pues desde el pasado miércoles, el agua vuelve a brillar por su ausencia y en ningún barrio se reportaba abastecimiento, al menos, hasta la mañana de ayer.
Sobre este aspecto no hemos podido tener una versión oficial al respecto, no obstante, el Presidente de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado Sam Tonchigüe, Ramón Lara Olivo,señaló que está haciendo lo posible por solicitar una audiencia con el Presidente Ejecutivo de la EAPA, Miguel Salvatierra, para exponerle este asunto y que se hagan conocer los motivos por los que el agua no se sigue enviando a estas comunidades.
De otro lado señaló que se mantiene el cronograma de envió del tanquero municipal a estas dos comunidades y espera que mañana retorne a la parroquia para continuar distribuyendo agua clorada de los pozos profundos del recinto Same.
Mientras tanto, entre la población existe la incertidumbre, porque el servicio empezó a mejorar a raíz de la visita del Presidente a nuestra provincia y se está haciendo costumbre que cuando hay altas autoridades gubernamentales en este sector, el servicio de agua potable mejora notablemente durante el lapso que ellos permanecen aquí y hasta por unos dos días más.
Se indica que sólo en esos casos el servicio es más o menos aceptable, pero en la mayoría del tiempo, las comunidades de Same y Tonchigüe padecen del líquido vital, y la excusa es siempre la falta de presión, situación que está oliendo a falsedad por cuanto, en las visitas de las altas autoridades, la tan culpada presión es de lo más optima y envía agua con facilidad a los barrios de Same y Tonchigüe.
En esta población se especula que los encargados de la distribución dan preferencias de envíos a los grandes hoteles de Tonsupa, Atacames y Súa e, inclusive, se desviaría agua hacia los complejos habitacionales de Casa Blanca en el mismo Same, en perjuicio de esa comunidad y de la cabecera parroquial de Tonchigüe.
Sobre este último aspecto, al anterior Administrador, Omar Estupiñán, había descartado esa posibilidad, porque según él, había revisado los diferentes Bypass y no se notaba que se estaba desviando agua hacia Casa Blanca.
En todo caso, esta especulación sólo está en la conciencia de quienes son los encargados de distribuir el agua hacia estas dos importante localidades de la zona sur de nuestra provincia, pues de lo que se conoce, el servicio siempre llega con normalidad hasta Súa y, desde allí, hasta Same la situación difiere notablemente sin que haya una explicación lógica que, por ahora, convenza a los moradores de Same y Tonchigüe.
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