Hasta la tarde del pasado lunes continuaba la dotación regular de agua potable a través de las redes, hacia los barrios de la cabecera parroquial de Tonchigüe y del centro poblado de Same, aunque en horarios no establecidos, y, por ello, las familias deben estar pendientes de la dotación para poder abastecerse de agua.
Hasta el momento no hay ningún pronunciamiento oficial por parte de los principales de la Empresa de Agua Potable y Alcantarillado (EAPA) San Mateo, sobre la regularización del servicio a estas dos comunidades, por lo que se desconoce si el servicio se mantendrá en esas condiciones o, en el mejor de los casos, tiende a normalizarse, aunque también hay la incertidumbre de que en cualquier momento, otra vez vuelvan a padecer del desabastecimiento al que estuvieron sometidos por casi alrededor de 3 meses en algunos casos y, en otros, por mucho más tiempo.
Lo cierto es que, de alguna manera, la entrega de agua potable a través de las redes, ha venido a satisfacer a las familias que hasta el momento se han abastecido del líquido vital, aunque es posible que existan hogares a donde todavía no ha llegado el agua, tal es el caso de la parte alta del barrio San Antonio, sector que sufre de desabastecimiento casi permanente porque, según han manifestado técnicos entendidos en la materia, las redes no permiten una mayor presión para abastecer a la totalidad de ese populoso barrio tonchigüense.
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