El análisis microbiológico y/o fisicoquímico de las aguas del río Abdón Calderón y de la cisterna de la Guardería 9 de octubre, se efectuó a pedido de la Junta Parroquial de Tonchigüe, a través de la Comisión de Turismo y Medio Ambiente.
El Presidente de esa comisión, Aníbal Leones Pisco, refirió que como autoridades de la Junta Parroquial, se encuentran en una campaña de evaluación de todas las aguas que se consumen en los diferentes sectores de la parroquia, acción que la realizan porque es deber de la entidad parroquial velar por la salud de sus conciudadanos.
Agrega que, en ese aspecto, se solicitó la toma de pruebas de algunos pozos someros de la cabecera parroquial, así como de otras fuentes de las cuales se abastecen los tonchigüenses, entre ellas la que proviene de la EAPA San Mateo y la que se está obteniendo actualmente de los pozos profundos del recinto Same.
Indica que esas muestras se han enviado y “una vez que lleguen los resultados haremos conocer a la comunidad entera en qué condiciones están las aguas que estamos consumiendo actualmente”, señaló.
Aclara que las muestras las han tomado los mismos técnicos de la Dirección Provincial de Salud de Esmeraldas, “ellos lo hacen de una manera técnica y yo creo que allí no hay errores. Ellos mismos hicieron las primera pruebas de Abdón Calderón y las segundas que se hicieron en los otros sectores cuyos resultados oportunamente nos llegarán”, manifestó.
Señala que estas pruebas toman su tiempo y por ello hay que tener un poquito de paciencia para esperar los resultados, agregando que aspira que el agua que viene de la EAPA San Mateo, no tenga ningún problema, al igual que la que sale de los pozos profundos, “puesto que son las que más consume actualmente nuestra población”.
Dio por descontado que las aguas que proviene n de los pozos someros y superficiales que existen en algunos hogares tonchigüenses revelarán todo tipo de contaminación, “pues otras pruebas practicadas ya los han revelado y esto se da porque, en los alrededores, existen pozos sépticos que contaminan los afluentes subterráneos”, explicó.
Y en cuanto al agua potable que recibimos de la EAPA, muestras ciertas dudas, aunque reconoció que el año pasado, en compañía de una comisión de tonchigüenses, viajó a las instalaciones de la Empresa y constataron que el agua es de buena calidad y bien tratado, pero la preocupación radica en el lapso del traslado del agua, desde que sale de la planta hasta que llega a los hogares tonchigüenses, “espero que no haya ningún agente externo que nos esté contaminando el agua”, señaló.
En todo caso, concluye manifestando, que lo recomendable sería clorar o hervir el agua para poderla consumir con mayor seguridad para la salud de los tonchigüenses.
No hay comentarios:
Publicar un comentario