Por segunda ocasión los estudiantes del colegio ‘Carlos Concha Torres’, desde las 08:00 hasta las 10:30 de ayer, exigieron la salida de las nueve familias albergadas por más de cuatro meses en el plantel educativo, con el bloqueo de la vía que conduce a Atacames y ligeros disturbios.
Mientras los protestantes con una barrera humana tenían inaccesible el tráfico de sur a norte y viceversa, en lo ancho de la carretera, al notar la presencia de la Policía a eso de las 09:45 les lanzaron piedras, mientras que los uniformados antimotines respondieron disparando bombas lacrimógenas. Nadie resultó herido como hace dos meses, -en similar protesta- cuando un estudiante fue lesionado con un artefacto explosivo.
Cientos de turistas que se dirigían a los balnearios del sur de la provincia y otros que retornaban para viajar en su mayoría a la sierra, protestaron por la medida de hecho, pidiendo a las autoridades que no se repita situaciones como esas.
Tras dos horas de diálogos, Hólger Quiñónez Pacheco, delegado de la Dirección Provincial del Ministerio de Inclusión Económica y Social (MIES), anunció que reubicarán a los albergados en el colegio ‘Carlos Concha’ en la infraestructura que será cuartel de Bomberos del sur, en el valle de San Rafael.
Un representante de los damnificados constató las condiciones del lugar, luego que técnicos de Gestión de Riesgos limpiaron y adecuaron las instalaciones que cuenta con los servicios básicos y divisiones tipo cuartos.
Cómo a las 10:30, los estudiantes levantaron la medida y la circulación se normalizó en la vía Esmeraldas Atacames.
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