Uno de los sectores que mayormente congrega visitantes en la parroquia Tonchigüe, Balneario de Same, es el club Casa Blanca, compuesto, por imponentes condominios que se copan de turistas y el feriado que acaba de culminar no podía ser la excepción, con la diferencia que, en esta ocasión, los visitantes encontraron en las playas del balneario de Same, una serie de entretenimientos extremos, entre los que pudimos observar, los famosos parapentes, donde el osado aventurero es lanzado a la atmósfera y con el empuje de una lancha a motor fuera de borda, más la fuerza del viento, se sostiene por largo tiempo en el azul celeste del cielo, teniendo como red el extenso mar azul.
Otro deporte extremos que ha marcado la diferencia en las playas de Same, son una pequeñas embarcaciones, similares a la Kayaks, donde el o los practicantes van sentados mirando hacia la proa, mientras rema con fuerzas jugueteando entre las olas del mar y trazando el viento para poder avanzar.
Asimismo pudimos observar las tradicionales bananas, donde varios participantes se acomodan y son arrastrados por una lancha a motor, mientras disfrutan del golpeteo de la brisa marina, con el riesgo de, en cualquier momento, caer sobre la superficie del cautivante océano pacífico.
Y mientras algunos turistas se dedicaban a disfrutar de estos deportes extremos, otros se deleitaban con un reparador baño de mar o simplemente recibían los tonificantes rayos solares, ya sea acostados sobre la arena o caminando a lo largo de la extensa playa.
Lo importante era no desperdiciar un minuto de la temporada vacacional, sin estar en el permanente contacto de los naturales productos turísticos con que cuenta ese importante balneario atacameño: Mar, sol, playa y aire.
Y aunque todo pareciera ser vacaciones y turismo, entre los visitantes siempre encontramos un nutrido número de servidores turísticos ofreciendo la más variada producción local, desde artesanías, pasando por frutas tropicales hasta los más variados platos típicos de la zona, todos ellos, basados en los más exóticos productos marinos.
Tampoco debemos olvidar que al interior de ese imponente complejo habitacional, hay un número considerable de amas de casa que atienden a los visitantes lo que, de alguna manera, les deja un rédito económico que les ayuda al sustento de su hogar, aunque sea por esta corta temporada.
En definitiva, el imponente Club Casa Blanca, continúa siendo una de las principales fuentes de ingreso de nuestra parroquia por ello, cada vez se incrementan los atractivos que cautivan a los miles de visitantes que arriban en temporadas altas a este sector y es que la mayoría de ellos son personas potentadas, desde prósperos comerciantes, pasando por destacados profesionales hasta renombrados políticos que disfrutan de sus vacaciones en las playas de este turístico balneario.
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