miércoles, 19 de agosto de 2015

Preocupa pesca con materiales inadecuados.


Los pescadores artesanales de Tonchigüe decidieron oficiar a las autoridades competentes para que tomen cartas en el asunto.

La presencia de un número considerable de pescadores provenientes de otros sectores de la provincia y que, de un tiempo a esta parte, vienen realizando faenas de pesca, en horas de la noche, frente a las costas de Tonchigüe, con materiales impropiedades y que perjudican la sustentabilidad de los productos marinos, está generando preocupación en los pescadores artesanales de esta localidad.

“Nosotros los pescadores estamos sufriendo porque los señores que tienen embarcaciones grandes con trasmallos que miden hasta 6 metros de altura, nos están dañando las especies que nosotros con redes artesanales camaroneras capturamos diariamente para llevar el sustento diario a nuestras familias”, señaló el pescador artesanal, José Vásquez Aveiga.

Nilo Quintero Márquez, dirigente comunitario, dijo que los afuereños están pescando muy a la orilla y con los grandes trasmallos que cargan dañan las redes artesanales de los pescadores de la población.

La pesca ha disminuido.

“Antes se podía capturar entre 20 y 30 libras de camarones (langostinos) y hoy únicamente se captura entre una y dos libras diariamente. Algunos compañeros que han hecho créditos están pasando dificultades para cubrirlos por la escasez de la pesca”, señaló Quintero.

Por esa preocupación, un grupo de pescadores artesanales se reunió en la mañana del martes y resolvieron emitir sendas comunicaciones a las autoridades de Medio Ambiente y de la Subsecretaría de Recursos Pesqueros, para que tomen cartas en el asunto.

Se indicó que copia de la comunicación también será emitida a la Tenencia Política, Junta Parroquial y Retén Naval de la localidad, para que todas las autoridades conozcan de la problemática por la que vienen atravesando.

Afectación a las especies.

Indicaron que la pesca con esos grandes trasmallos denominados voladores, afectan considerablemente las especies, porque el ojo de malla es mediano, la altura es de 6 metros o más y rueda de un lado a otro arrasando con todo lo que encuentra a su paso.

Sobre el tema y mientras participaba de la reunión del martes, el marino guardacosta, Gustavo Vera, comentó que ellos como autoridades de las Fuerzas Armadas estaban apoyando la iniciativa de la emisión de la comunicación a las autoridades competentes.

“Y les estamos exponiendo ciertas ideas para salir junto con ellos a controlar que no se pesque con las mallas que les está preocupando, porque nos indican que los pescadores que vienen con ese material están desde las 4 de la tarde aproximadamente hasta la madrugada del siguiente día”, comentó el uniformado.

Esperan respuesta.

En todo caso, los pescadores tonchigüenses esperan que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto, considerando  que, actualmente, la captura de camarón langostino a través de la pesca artesanal que realizan los habitantes de esta localidad, ha disminuido considerablemente y, como ya lo indicó uno de ellos, está afectando la economía de las familias tonchigüenses que, en su mayoría, viven de esta actividad.

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