martes, 9 de diciembre de 2014

Escuela Quito cerró semana cultural con casa abierta.


La Unidad Educativa de Educación Fiscal Básica “Quito”, de la parroquia Tonchigüe, cerró su semana cultural en la mañana del pasado viernes con una casa abierta en la que los diferentes años básicos realizaban diversas exposiciones, destacando una feria gastronómica de mariscos en la que se expusieron una diversidad de platos y que, de alguna manera, integró a docentes, estudiantes y padres de familias del indicado plantel educativo.

            “Está muy bonito esto. Se ve la colaboración de los padres de familias, porque, de alguna manera, hemos colaborado para que esta actividad se haga realidad”, señaló una de las madres de familias que se encontraban en uno de los diversos estands.

            Con ese criterio coincidía, Carmen Delgado, otra madre de familia que se encontraba en el lugar, “porque todos somos padres aquí y, por sobre todo, nuestros esfuerzo es por los niños”, señaló.

            “Aquí tenemos una exposición de almohadas y, además, vamos a participar del plato típico en la feria gastronómica”, añadió otra dama que se encontraba colaborando con la casa abierta.

Y, en efecto, el Coordinador del Circuito Educativo Tonchigüe, Jacinto Chávez Ramírez, destacó la indicada casa abierta, puntualizando la diversidad de objetos elaborados manualmente por los propios estudiantes del plantel, así como con los platos típicos que, a base de mariscos, se exponían en los interiores del plantel.

“Estamos viendo que la gente está participando cada año mucho más de estas actividades y que los padres de familias se están vinculando de mejor manera para colaborar con este tipo de actividades”, señaló el docente a manera de evaluación.

Por su parte, la profesora del plantel, Marilín Castillo, señaló que a través de la casa abierta y, particularmente de la feria gastronómica,  hacen que los chicos participen construyendo sus platos típicos y, de esa manera ellos aprenden para, en el futuro, elaborarlos sin inconveniente alguno.

“Esto nos permite también incentivar a las personas y que todos creemos una conciencia de cambio y, a más de eso, nos ayuda a fomentar muchos valores, como el orden, la disciplina, la cooperación, la honestidad y, por sobre todo, la solidaridad”, destacó la docente.

            Posteriormente, un jurado calificador compuesto por varias autoridades de la parroquia, designaron como el mejor plato típico, a una bandeja de mariscos elaborado por el tercero “A”; en segundo lugar se ubicó otra bandeja de mariscos del cuarto “B”; tercer lugar, un arroz marinero del Cuarto “A”; y, el cuarto lugar, una sardina cacera del Octavo “C”.

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