El martes anterior, mientras varios dirigentes de Same se encontraban en una reunión en la Junta Parroquial de Tonchigüe, el Presidente de la Junta de Agua Potable y Alcantarillado Same Tonchigüe, Ramón Lara Olivo, aseguró que varias viviendas del sector de Same estaban recibiendo el líquido vital y tenía la incertidumbre de que, aunque había agua, esta se estaba desviando hacia los condominios del Club Casa Blanca, en perjuicio de las comunidades de Same y Tonchigüe.
Frente a esa inquietud del dirigente comunal, luego de la reunión en la Junta Parroquial, la mayoría de los asistentes se dirigieron hacia los sectores donde se encuentran las válvulas distribuidoras y, en una vivienda cercana a ellas, se detectó que, en efecto, había agua con cierta normalidad.
La dueña de casa explicó que su conexión estaba en la red madre, antes de las válvulas, asegurando que tenía agua desde hace 3 días. Posteriormente se constataron las válvulas y se detectó que todas estaban cerradas, por lo que se descartó que se estaba enviando agua a Casa Blanca, como se presumía.
Posteriormente, el encargado de la distribución del agua en este sector, Cruz Bermeo, aclrando que no está autorizado para dar declaraciones públicas, explicó a los medios de prensa local que, en efecto, así se generan los rumores que, en muchas veces, le endilgan a él como responsable y le acusan, sin ninguna base, hasta de corrupción, aclarando que, por el sector, eran alrededor de 3 ó 4 viviendas las que, en ese momento, tenían abastecimiento de agua, agregando que eso ocurría porque había agua almacenada en un tramo de la tubería.
“Es decir, con la poca presión que existe el agua en la primera pendiente sube y baja hasta este sector sin poder subir hasta el tanque de Tonchigüe, por lo que esa cantidad de agua es la que llega a las viviendas de este lugar”, explicó.
“Ahora recibí la disposición de que abra las válvulas para darle esa agua a los barrios Nueva Esperanza y San José. No es mucho lo que recibirán en un lapso no mayor a 15 minutos”, refirió.
Posteriormente, en un breve recorrido a lo largo de la red madre, mostró una severa afectación en una caja donde se encuentran los reguladores automáticos que distribuyen al gua hacia los diferentes sectores de Same y Tonchigüe, reguladores compuestos de 3 válvulas, de las cuales sólo una funciona y las otras dos están dañadas.
La Caja de protección de los reguladores se observa seriamente afectada, pues una de sus paredes se ha ido al piso y la tierra amenaza con tapar la totalidad de las válvulas.
El funcionario añadió que, además, se encuentran dañadas las válvulas desairadoras, las cuáles servían para evacuar el aire que se acumula en la red principal y el desaire, desde hace mucho tiempo, lo realiza el mismo de manera manual.
Explica que es necesario retirar el aire de las tuberías, porque el peso del mismo puede ser superior a la presión del agua y crearía dificultad para la circulación del líquido vital por el ducto, pudiendo llegar, inclusive, a reventarse.
En todo caso, el funcionario intentaba dejar constancia de que el no es el responsable de la deficiencia del agua potable en las comunidades de Same y Tonchigüe.
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