Las constantes
crecientes del río Tonchigüe, como consecuencia de la intensa temporada
invernal que se ha presentado en el transcurso del último mes, ha erosionado
considerablemente una parte de la ribera del río a la altura del barrio San
Antonio y ha estrechado peligrosamente una calle que da acceso a por lo menos
10 viviendas del sector y hacia la zona del recinto Barlovento.
La
moradora del sector, Liliana Arteaga, señala que la afectación empezó a
suscitarse desde hace más de un mes y, en cada creciente, la arteria ha ido
estrechándose cada vez más. “Si no se hace nada para evitar que el la tierra se
siga desbarrancando es posible que esto llegue hasta las viviendas que están en
este sector”, dijo en tono de preocupación la humilde dama.
Por
su parte, el ciudadano Julio Zambrano
comentaba que esta calle le permite acortar distancias hacia el sector
del recinto Barlovento, donde él tiene una pequeña finca. “Por aquí paso todos
los días y, en cualquier momento ya no podré hacerlo y tendré que dar la vuelta
por Abdón Calderón. Ojalá arreglen pronto este asunto dijo”, dijo con la voz
entrecortada por el cansancio, pues él hace el recorrido a pie por este sector.
De
su lado, una dama que no quiso dar su nombre, refirió que la calle, en alguna
ocasión, fue rellenada por la Municipalidad y quedó en óptimas condiciones,
facilitando el paso, particularmente a los niños y niñas del sector que, épocas
de clases, acuden diariamente a sus estudios. “Si esto sigue así los mayores
perjudicados van a ser los niños estudiantes”, comentó.
Por
la preocupación existente en ese lugar, la totalidad de las personas
consultadas, coincidieron en hacer el llamado a las autoridades Municipales del
cantón Atacames para que inspeccionen el sitio y, de inmediato, realicen un
trabajo emergente en el sitio para evitar que el río, en un tiempo no muy
lejano, se lleve la totalidad de la calle, con el riesgo de afectar hasta las
viviendas del sector.
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