Colegio Tonchigüe incorporó nuevos bachilleres.

Un total de 40 nuevos bachilleres entregó a la sociedad ecuatoriana el Colegio Técnico Fiscal “Tonchigüe”, asentado en la parroquia del mismo nombre, en el cantón Atacames, cuya incorporación se efectuó el viernes anterior en horas de la mañana, en una de las aulas del indicado plantel.

            La ceremonia se extendió por alrededor de dos horas y media, siendo dirigida por quien hasta ese momento ostentaba el cargo de Rector encargado del plantel, Williams Chila, y a quien le correspondió incorporar formalmente a cada uno de los estudiantes que se recibían como los nuevos bachilleres Técnicos en Comercio, Especialidad servicios de Restaurante y Bar.

            La apertura del acto de la ceremonia la hizo la maestra Narcisa Rueda, quien destacó el esfuerzo realizado por los estudiantes para alcanzar tan digna meta, reconociendo el trabajo desplegado por sus compañeros maestros, así como por los padres y madres de familias de los chicos y chicas que, en ese momento, se incorporaban como los nuevos bachilleres de la República.

            Una vez que se culminó con la entrega de las respectivas actas de grados a cada uno de los estudiantes incorporados, el Rector del plantel, hizo una intervención haciendo referencia a que, desde el despacho a su cargo, no tuvo otra intención más que la de ayudar a que los jóvenes, “hombres y mujeres, enrumben y se vayan por buen camino, porque no tenemos ningún otro compromiso que no sea con el de la juventud y con el de la niñez”, aseguró.

            Luego se hizo la entrega de una mención de honor a la mejor egresada de la promoción, Fabiola Elizabeth Bermeo Bermeo, quien en una emotiva alocución destacó el trabajo desplegado por sus maestros en cada uno de los estudiantes que en ese momento se incorporaban.

            La ceremonia culminó con el tradicional brindis y, posteriormente, los abrazos y la felicitación a los estudiantes incorporados por parte de sus familiares, abrazos que se entremezclaban con las lágrimas de la emoción, pues se había culminado una meta y ahora miraban un futuro desconocido pero que, con toda seguridad, lo sabrán enfrentar luego de haberse iluminado con las enseñanzas recibidas en las etapas educativas anteriores.