Producto de una penosa enfermedad que le venía aquejando desde hace mucho tiempo, en la tarde de hoy dejó de existir, una de las más antiguas moradoras de la parroquia Tonchigüe, Rosa María Bone Olivo, cuando frisaba los 96 años de edad.
La extinta era conocida en la parroquia Tonchigüe, como Doña Rosa Madama, habiéndose destacado en la cura de las enfermedades míticas del mal de ojo, malaire, espanto, entre otras, pues muchas personas de la localidad, creyentes en esas curaciones, tenían fe en el acertado trabajo de Doña Rosa, pues muchos aseguran haberse curado con el tratamiento que ella les otorgaba.
Según sus hijos, Doña Rosa nació y vivió durante toda su vida en esa localidad, habiendo sido su esposo el extinto Víctor Manuel Reyes Salazar, quien viajó al encuentro del señor hace 15 años aproximadamente y con quien procreó un total de 11 hijos, de los cuales 10 aún viven; 8 mujeres y 2 varones.
Los restos de Doña Rosa Madama, se están velando en la que fuera su vivienda, ubicada en el centro poblado de la parroquia Tonchigüe en la esquina de las calles 26 de Noviembre y Baltazar Cusme, frente al Parque El Centenario y, según informaron sus familiares, el sepelio se efectuará mañana sábado, a las 15:00, en el cementerio general de la parroquia Tonchigüe.
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